lunes, 28 de marzo de 2011

El guerrero nº 13

AVISO IMPORTANTE:
Para todos los incautos que viven su vida ajenos a las constelaciones zodiacales, y que, como yo, no se habían enterado, hemos asistido al nacimiento de un nuevo signo del zodiaco. Sí, señores, comprueben su adscripción zodiacal de forma inmediata, porque todos los signos se han reducido unos días, con el evidente resultado de que casi nadie es lo que era. Lo más llamativo es que han insertado otro signo del zodiaco más, dejando atrás el sereno número 12 para recibir al aterrador guerrero número 13, el Ofiuco, el portador de la serpiente.

Algunos dicen que ya Nostradamus hablaba de esta ampliación como el principio del fin, del apocalipsis anunciado para el año que viene, así que supuestamente cuando el sol se ponga en Ofiuco se producirá una alineación planetaria que mandará a todo el mundo al garete... por si no daba ya suficiente mal rollito eso de los 13 signos del zodiaco.

Yo, que me consideraba Sagitario hasta la médula, resulta que ahora soy "esa otra cosa nueva". Y lo más curioso es que leyendo las supuestas características de este nuevo signo, me siento identificada también...
Qué curioso, quizá es que mi personalidad necesitaba de un signo nuevo porque Sagitario ya se me quedaba obsoleto, no sé. Lo mejor de todo es que me enteré en una reunión familiar... imagínense ustedes el cachondeito. Pero así por lo menos desde un principio me lo he tomado con humor, esto de mi nueva condición.

Me llevará un tiempo adaptarme, es un cambio radical en mi vida, y tendré que empezar a superar esa manía inconsciente que tenemos al número 13; con lo bonito y redondo que era el 12... los meses del año, las campanadas, las vueltas que da la luna alrededor de la Tierra, las 12 tribus de Israel, los 12 apóstoles...y ahora cambiamos por un número primo y encima gafe. Así que si ustedes notan algún cambio en mi actitud, en mi forma de escribir o incluso en mi forma de pensar, no me lo tengan en cuenta, ahora soy miembro de una nueva generación y nunca se sabe cómo puede afectar eso a una máquina de pensar, ya saben...

En fin, espero que los ofiucos no seamos responsables del fin del mundo, y si es así, pido disculpas con antelación y ofrezco mi apoyo psicológico desde aquí a todos los ofiucos que se sientan desorientados o rechazados por sus entornos. Los ofiucos dominaremos el mundo algún día!
Sí, tú rite, rite..